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desesperacion  "Preocuparse es utilizar tu imaginación para crear algo que no deseas", A. Hicks.

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“Preocuparse es utilizar tu imaginación para crear algo que no deseas”, A. Hicks.

Deberíamos recordar esta frase a diario. Muchas veces, tendemos a preocuparnos sin apenas darnos cuenta de ello. De repente, no sabes muy bien cómo, te encuentras enredado en tu mente, tratando de resolver algo desde la confusión de ésta. Eso sólo crea más caos y agotamiento. Nada creativo y fresco puede llegar a tu mente con facilidad desde ese estado. Más bien, lo contrario. Cuanto más nos preocupamos, más lo complicamos. Todos lo sabemos. Encontré lo siguiente en un página:

Hay un ladrón que anda suelto y quiere robarnos la alegría, la energía, la paz de espíritu y hasta nuestra salud. ¿Su nombre? La preocupación.

Aunque no exista mucha razón para sentirla, puede hacer que perdamos nuestro sentido de la perspectiva. Alguien dijo que es “una corriente de temor que recorre nuestra mente Si lo permitimos, y que cortará el canal a través del cual corren los demás pensamientos.” La palabra proviene del latín, y significa “ocupar anticipadamente la mente o el ánimo de uno, de modo que estorba para admitir otra cosa”. En inglés, proviene de una palabra en alemán que significa “estrangular”. Literalmente, la ansiedad quiere estrangularnos espiritual, emocional y físicamente. La preocupación no elimina la aflicción del mañana, pero sí nos quita la fuerza del día de hoy. Silvia de Solares

Interesante y cierto. Si con nuestra imaginación estamos siempre activando nuestra vibración hacia aquello en lo que nos estamos enfocando y, en consecuencia, dándole fuerza y atrayéndolo hacia nuestra experiencia, entonces, ¿qué estamos atrayendo con nuestra preocupación?. Estamos ayudando a dar vida a nuestros miedos en lugar de a nuestros sueños.

Sabiendo esto entonces, cada vez que te sorprendas a ti mismo preocupándote por algo, dáte cuenta de que estás ayudando a atraer lo que no quieres. Toma el control de tus pensamientos y redirígelos hacia un lugar constructivo. Pregúntate: si me preocupa esto entonces, ¿cómo me gustaría que terminara esta historia?, ¿cómo me sentiría si esto se resolviera de la mejor manera imaginable?. Cierra tus ojos y recrea tu escena ideal. No te preocupes en ese momento de si lo que estás imaginando sucederá o no; si es posible o imposible. Ni del cómo lo solucionaste. Sólo recréate en el “final feliz”. Simplemente, se trata de regalarle a tu mente un descanso, ofreciéndole con tu imaginación aquello que ella está tratando de encontrar. Regálale la paz y la alegría de tu escena imaginaria ideal. Con lujo de detalles. ¿Dónde estás?, ¿con quién estás?, ¿qué llevas?, ¿qué te dicen?, ¿qué dices tú?, ¿a qué huele?, ¿cómo te sientes?, ¿y los demás?…Puedes consultar también este post: desconecta tu mente cuando te sientas cansado

Esto hará que tu nivel de energía se recupere, en lugar de caer en espiral hacia lo que no deseas. Y que dirijas tu energía creadora de tu realidad, hacia lo que sí deseas. Verás como ésta es la manera en que las soluciones serán atraídas hacia ti.

Te deseo un muy feliz día!…libre de preocupaciones 😉

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